Canta conmigo: “pican, pican los mosquitos..”.

Verano es sinónimo de calor, mosquitos y vacaciones. Si quieres averiguar qué tienes que hacer para que no te piquen, sigue leyendo.

Seguro que conoces las infernales picaduras que te dejan los mosquitos en verano. ¡Qué sufrimiento, qué picor y qué molestos son!

Los mosquitos al picarnos intercambian su saliva por nuestra sangre, ya que la necesitan los mosquitos hembras para nutrirse y poner sus huevos. Nuestro cuerpo reacciona ante esa sustancia extraña liberando histamina, aumentando la vasodilatación. De aquí viene el picor y la inflamación. ¡Aunque no todas las picaduras son iguales!

Las hay pequeñas, que pasan desapercibidas sin pena ni gloria y picaduras que pueden llegar a infectarse. Se puede originar una celulitis infecciosa, incluso puedes llegar a tener fiebre y se debe tratar directamente con antibiótico. En determinadas situaciones, especialmente alérgicas a las picaduras, se puede originar una reacción alérgica exagerada con inflamación excesiva y anormal.

¿Qué debe llevar un repelente para que sea eficaz? ¿Cuanto más huela más efecto hace? ¿Si me lo pongo más veces me picaran menos? ¿Los repelentes químicos dañan la piel? ¿Los repelentes naturales funcionan? Sigue leyendo y descubre las respuestas.

Los repelentes naturales hacen el mismo efecto que los químicos. Verdadero y falso, depende. La mayoría de los naturales son menos eficaces, tienen menos estudios y necesitan una aplicación más constante para completar la acción. Sin embargo, el repelente que contenga citriodiol llegará a ser tan efectivo como los químicos.

La mayoría de los repelentes químicos están formulados con DEET (N,N-Dirtil-meta- toluamida), icaridin o IR3535 y son completamente seguros según numerosos estudios de la EPA. El único uso que está restringido es a los niños muy pequeños porque se puede absorber más en su piel.

¿Qué concentración de repelente de mosquitos es la más adecuada?

Lógicamente cuanto más concentración de DEET es más eficaz. En España nos sobra con una concentración del 20-35%. Para viajar a países tropicales necesitamos una concentración del 35-50% de DEET. Dependiendo del país y de qué mosquito habite, también necesitarás una concentración u otra.

Tanto el DEET como el icaridin son los activos que desorientan a los mosquitos y evitan su acercamiento. Se guían por señales químicas, es decir, por el olor. Lo que más atrae a estos bandidos son el sudor y la humedad, por eso en países tropicales hay que prestar especial atención. ¿Sabías que el ácido láctico, el octenol y el dióxido de carbono que desprendemos al respirar también los atrae?

Pero no solo luchas contra mosquitos, aunque no lo sepas luchas contra pulgas, garrapatas y tábanos.

Repelentes de mosquitos según la edad:

• Para los niños menores de dos meses se desaconseja el uso de cualquier repelente. Aunque se podrían usar repelentes naturales con citronella para el ambiente, el carro o la cuna.
• Hasta la edad de 1 o 2 años se puede utilizar de manera eficaz y segura repelentes de IR3535 y citronella, reaplicandolo varias veces al día. Evitar siempre aplicar los repelentes de mosquitos en la cara y las manos para que no se lo lleven a la boca.
  A partir de los 3 años ya se puede aplicar productos naturales y químicos con concentraciones bajas de DEET.
• En el embarazo y lactancia no se ha demostrado que esté contraindicado, pero se aconseja evitar la aplicación durante el primer trimestre de embarazo. Algunos repelentes naturales se pueden aplicar en las extremidades a partir del 4 mes (pero lo debe indicadar en el envase).

Para prevenir las picaduras existen repelentes y complementos como las pulseras de citronella y los parches que están recomendadas para mayores de 3 años. No deben sustituir nunca a los repelentes. Y por supuesto: evita colores llamativos (el blanco es el color del verano), olvídate de ponerte perfume, usa mosquiteras y si eres de “sangre “dulce” intenta cubrirte las zonas expuestas.

Paloma Sastrón

http://www.starfarma.es