¿Ha llegado la alergia al polen a Alcorcón?
Moqueo, lagrimeo… Te contamos los síntomas más habituales de la alergia y cómo tratarla.
Junto con el buen tiempo, los primeros rayos de sol y la aparición de multitud de plantas que alegran las calles de Alcorcón con sus colores, llega también la pesadilla anual de muchos: la alergia estacional.
Se trata de una patología que, aunque no es grave, es muy molesta y consigue condicionar el día a día de los que la padecen y, por esto, les dedico el post de hoy.
Es un problema más común de lo que crees… Aunque aún pueda parecer una patología que solo afecta a unos pocos, según la SEAIC (Sociedad Española de Alergología e Inmunología), hay más de ocho millones de personas que la sufren.
¿Sabes por qué se produce y en qué consiste la alergia al polen?
Dirás “¡Claro! Por la pelusilla esa blanca que empieza a colonizar las calles a partir de marzo”. Pues siento decirte que esa idea es errónea. Aunque la “pelusilla blanca” también es muy molesta no es la causante de los síntomas.
La alergia o rinitis estacional, denominada en el mundo sanitario como polinosis o fiebre del heno, se produce por una respuesta exagerada del organismo al polen (molécula microscópica que está en el aire suspendida y actúa como alérgeno). Cuando éste entra en contacto con nuestras mucosas el cuerpo libera una gran cantidad de histamina que es la responsable de los síntomas característicos.
La sintomatología seguro que te es familiar (en ocasiones se confunde con resfriado):
- Lagrimeo, picor y enrojecimiento de los ojos.
- Picor, congestión y goteo nasal (mucosidad transparente y fluida generalmente).
- Estornudos frecuentes.
- Picor de garganta y paladar.
- Fatiga y cansancio.
- Dificultad respiratoria y/o asma (en casos más graves).
Y… ¿qué necesito saber sobre el polen si tengo alergia?
Lo primero que necesitas conocer es que no todas las plantas lo producen y no siempre lo hacen con igual intensidad. Las que más comúnmente lo producen son: gramíneas, olivo, parietarias, abedul, cupresáceas o plátano de sombra. Además, los niveles de polinización están condicionados por las condiciones climáticas y también por la hora del día. De este modo, los días calurosos, secos y ventosos la concentración es mayor y, además, su presencia en el aire se intensifica por la mañana (5-10 am) y por la tarde (7-10 pm).
¿Cómo se puede tratar la alergia?
Una de las medidas más efectivas para minimizar los síntomas de la alergia es evitar el alérgeno. Para eso recomendamos las siguientes medidas higiénicas para que la alergia sea lo más leve posible:
- Evita las salidas al campo/actividades al aire libre los días en que la concentración de polen es elevada (puedes consultar los niveles aquí: https://www.polenes.com/home
- Evita hacer ejercicio intenso durante esta época para disminuir riesgo de asma.
- Mantén buena higiene de las manos y la cara (esta rutina ya la tenemos aprendida gracias a esta pandemia).
- Cierra las ventanas de casa durante el día y mantén un ambiente húmedo.
- Limpia tu hogar con frecuencia (mejor con aspirador).
- Ten en cuenta que antes y después de una tormenta, aumenta la concentración de polen.
- Usa gafas de sol y cubre tu nariz y la boca con una mascarilla los días de alta polinización (sí, para ellos el uso de mascarilla ya era normal).
- Viaja con las ventanillas del coche subidas.
- Cuando llegues a casa dúchate y cámbiate de ropa.
- Utiliza purificadores de aire en casa y en el coche.
- No cortes el césped ni podes en días de polinización intensa. Y evita tocar plantas.
- Evita tender la ropa al aire libre.
- Toma los medicamentos recetados por tu profesional sanitario, de forma regular y a la dosis recomendada.
- Realiza lavados nasales con soluciones marinas hipertónicas (indicadas para descongestionar, limpiar y arrastrar la mucosidad)
Existen varios medicamentos sin receta que podemos dispensar para la alergia. ¡Lo veremos en el próximo post!